Ana de Tejas Verdes
"Octubre era un mes precioso en Tejas Verdes; los abedules de la vaguada se volvían dorados como el sol, los arces de detrás del huerto cobraban un color granate majestuoso, los cerezos silvestres del sendero se vestían con las más preciosas tonalidades del rojo oscuro y el verde bronce, y los campos cubiertos de rastrojos tomaban el sol. Ana disfrutaba de aquel mundo de color."
Fragmento de Ana de Tejas Verdes de Lucy Maud Montgomery
Recuerdo que aún estaba en el colegio, así que tendría unos diez u once años, cuando en la televisión empezaron a emitir una serie de dibujos llamada Ana de las Tejas Verdes. Al principio no le presté atención, pero un día pillé un trozo. La primera vez la niña pelirroja no me cayó bien, hablaba por los codos y siempre se estaba metiendo en líos, pero una tarde mi madre me dijo que ella había visto una versión con personas de esa historia y que era Ana de las Tejas Verdes. El que nos llamásemos iguales hizo que le diera una oportunidad.
Poco a poco fui conociendo a Ana, a Marilla y a su hermano Matthew, a Gilbert y al resto de habitantes de Isla del Príncipe Eduardo. La serie me enganchó y encantó a partes iguales hasta al punto de que le pedí a mis padres que me la grabaran para así poder verla al volver del colegio. Salía de la escuela feliz todos los días porque sabía que al regresar a casa estaría esperándome un nuevo episodio que me transportaría muy lejos, más allá de un gran océano hacia una pequeña isla canadiense.
Después de que la serie terminara y averigüé que estaba basada en una serie de libros, así que quise leerlos. Los primeros cuatro volúmenes de la serie los devoré, pero antes de que empezara la secundaria ya no fui capaz de continuar, no porqué la historia empeorara sino porque cuando vi la serie ésta terminaba con Ana, aún siendo una adolescente, a punto de iniciar sus estudios para ser maestra. Los libros van mucho más allá contando su vida incluso de casada.
Llagado el momento sentí que la Ana pecosa y parlanchina de once años que conocí había dejado de existir para convertirse en una mujer casada y devota de su marido con la que ya no podía sentirme identificada. La emoción inicial causada por los rifirrafes entre Gilbert y Ana, que te hacía presagiar su amor, las travesuras de la niña, su vida con Marilla y Matthew en Tejas Verdes desapareció por completo y no pude seguir. Prefería recordarla como aquella niña y no como una ama de casa, que aunque feliz, había dejado de lado todos sus deseos de ser maestra para tener hijos y ser, en definitiva, "una buena esposa".
Entendí, o más bien entiendo ahora, que de un modo u otro su autora lo único que hacía era retratar el cómo funcionaban las cosas por aquel entonces y cuál era el papel de la mujer.
A pesar de lo que me sucedió entonces, ahora de adulta veo los libros de Ana de otra manera y los disfruto incluso más. Me ha encantado reencontrarme con esta nueva edición de toda la saga que Alma Clásicos se dispone a publicar y este primer libro es una auténtica joya. Con nueva traducción de Catalina Martínez Muñoz y con la increíbles ilustraciones de la artista Giselfust, nos trasladamos a la Isla Príncipe Eduardo viviendo mil aventuras junto a Ana Shirley.
En Ana de Tejas Verdes, se nos cuenta la historia de Ana que es adoptada por error por los hermanos Marilla y Mathew, quien quieren adoptar a un huérfano para que les ayude con las labores de la granja. Ana conquista su corazón y, por primera vez a sus once años, conoce lo que es tener un hogar de verdad, así que pese a los primeros obstáculos iniciales en su relación, se quedan con ella para siempre. En este primer título de la serie, asistimos a los primeros años de colegio de Ana, a sus primeras amistades y a un amor que se cocina a fuego lento (y con muchos malentendidos) entre la propia Ana y Gilbert.
En cuento a la autora, su forma de escribir afortunadamente no es recargada ni usa excesivas florituras, empleando un lenguaje bastante sencillo y asequible para cualquier tipo de lector. En mi opinión, fue una mujer bastante atípica para su tiempo que hizo realidad su sueño de ser escritora y no dejó que su matrimonio ahogara su pasión por la escritura. Además, Ana de Tejas Verdes tiene tintes autobiográficos, ya que la madre de la autora falleció siendo ella niña y su padre se desentendió y volvió a casar dejándola en el "Tejas Verdes" de sus abuelos, quienes la criaron.
Ana de Tejas Verdes de L.M. Montgomery es una novela juvenil entrañable y muy mágica, todo un clásico que merece ser descubierto y releído a cualquier edad. Una edición muy recomendable. ¡Mil gracias a Babelio y a Alma Editorial por el ejemplar!
Título: Ana de Tejas VerdesAutor: Lucy Maud Montgomery
Traducción por: Catalina Martínez Muñoz
Género: Literatura infantil y juvenil
Editorial: Alma Editorial
Formato: Papel
ISBN: 9788418395628
Páginas: 336
Precio: 16,95€ (Papel)
Argumento: Ana de Tejas Verdes es la primera de las nueve novelas en las que Lucy Maud Montgomery narra la vida de Ana Shirley, una niña de once años que deja el orfanato para irse a vivir a Tejas Verdes, la granja de los hermanos Cuthbert. Gracias a su carácter imaginativo, inteligente, alegre, fuerte y luchador, se gana no solo el corazón de su familia adoptiva, Matthew y Marilla, sino también el de todos los habitantes de Avonlea.
Adaptada al cine, a la televisión, al anime e incluso al musical, Ana de Tejas Verdes es un hermoso canto a la importancia de la familia, la amistad y los sueños.