EL ÚLTIMO CASO DE PHILIP TRENT: ¡Un clásico de la novela policíaca!

SÁBADO, 6 DE ENERO DE 2018

El último caso de Philip Trent

"Cuando un disparo de mano desconocida desperdigó el cerezo retorcido e indomeñable de Sigsbee Manderson, ese mundo no perdió nada que mereciese una sola lágrima; ganó algo memorable con el duro recordatorio de la vanidad de riquezas como las que había acumulado el muerto, sin un solo amigo leal que lo llorara, sin una sola acción que honrara en lo más mínimo su memoria. Pero, cuando llegó la noticia de su fin, a quienes vivían en los grandes vórtices de los negocios les pareció como si también la tierra hubiese temblado sacudida por un golpe."

Fragmento de El último caso de Philip Trent de E. C. Bentley

Siempre es agradable descubrir a un nuevo autor de novela policíaca y más aún a uno que revolucionó el concepto literario de detective que, a principios del siglo XX, se tenía. La novela de El último caso de Philip Trent del escritor británico E. C. Bentley, es una novela detectivesca muy atípica que se empeña en no seguir los cánones marcados hasta entonces. 

Cartel de la película de 1952

Su protagonista es un pintor, no un detective profesional, sino un aficionado de buena familia y con una posición acomodada. Por avatares del destino. Trent ha cosechado cierta fama al haber resuelto algunos casos peliagudos para la policía, lo que le ha llevado a forjar una amistad con el inspector Murch de Scotland Yard. Habiéndose ganado la simpatía del dueño del periódico Record, éste le pide a Trent que trate de resolver para el periódico el extraordinario crimen del más grande y odiado de los magnates, el empresario americano Sigsbee Manderson. Manderson ha sido asesinado de un tiro en la cabeza en plena madrugada en los jardines de su mansión en Inglaterra. La víctima se mostraba malhumorado y parecía sospechar que alguien quería matarlo, pero ¿quién? ¿Su joven viuda? ¿Su encantador secretario?

Trent pasa la primera parte de la novela inspeccionando la escena del crimen, hablando con los escasos testigos, la mayoría criados, y sabiendo más de la poco querida figura del fallecido. Manderson es descrito como un empresario despiadado y falto de compasión hacia sus competidores y hacia quienes se hallan por debajo de él. Un hombre tan odiado cuenta con muchos enemigos, sin embargo, para asombro del lector, Trent resuelve el crimen (o eso afirma él) y rápidamente se marcha de viaje para poner distancia. Lejos de haber concluido el caso, la segunda parte de la novela da el pistoletazo de salida para que tengan lugar los acontecimientos más interesantes y, junto a Trent, nos precipitamos hacia el esclarecimiento de éste gran misterio.

Fotograma de la película de 1952

Su autor utiliza un estilo muy cuidado y ágil que, a pesar de su atípica estructura y de su poco convencional detective, más preocupados por su carrera como pintor que como investigador, logra mantener la tensión y el suspende hasta el final. Bentley consiguió crear un clásico dentro de la literatura policíaca, el cual fue llevado al cine y a la televisión en varias ocasiones. Curiosamente, tras el éxito de su detective, más humano y menos infalible que los creados por sus antecesores dentro del género, su autor no volvió ha sacar un nuevo caso para Trent hasta dos décadas después. 

Aunque tenga poco que ver con la inteligente trama, no puedo obviar la cuidada encuadernación de esta gran colección de clásicos policíacos que Siruela ha tenido el gran acierto de rescatar para los lectores. Todos los libros de esta colección, son en tapa dura negra, con bellas ilustraciones en la portada muy acordes con la temática y tiempo de la obra, y unas magníficas traducciones.

Fotograma de la película de 1952

El último caso de Philip Trent de E. C. Bentley fue un éxito en su época y ya por su cuarta edición en España, ha demostrado serlo también en nuestro país. He disfrutado de tan original caso, de su personaje, su extraordinaria prosa y su inteligente final. Pero no sólo os recomiendo con gran insistencia que no dejéis pasar este libro, tampoco deberías pasar de estos otros grandes títulos de la colección publicada por Siruela:

• Un hombre muerto (reseña) y Un asesino en escena (reseña) de Ngaio Marsh.
• Una dirección equivocada (reseña) de Elizabeth Daly.
• Misterio en blanco (reseña) de J. Jefferson Farjeon.
• La muerte espera en Herons Park (reseña) de Christianna Brand.
• Muerte de un aviador (reseña) de Christopher St. John Sprigg.
• Muerte en la rectoríai (reseña) y ¡Paren las máquinas! (reseña) de Michel Innes.
• Los mejores casos de Max Carrados de Ernest Bramah.
• Detectives victorianas. Las pioneras de la novela policíaca edición de Michael Sims (Publicación 31/01/2018).

¡Mil gracias a Siruela por el ejemplar! ¡Felz Día de Reyes a tod@s! Espero que os hayan traído todo lo que pedísteis y más, ¡y muchos libros!

Título: El último caso de Philip Trent

Autor: E. C. Bentley

Género: Novela Policíaca, Novela Negra

Editorial: Ediciones Siruela

Formato: Papel y Digital

ISBN: 978-84-17151-17-1

Páginas: 212

Precio: 17,95 € (Papel) y 9,99 € (Digital)

Argumento: De poco le servirá su poder al temido magnate estadounidense Sigsbee Manderson cuando el jardinero de su finca en la campiña inglesa lo encuentre muerto de un disparo... El pintor y detective aficionado Philip Trent, que sigue con entusiasmo el caso a través de los periódicos, descubre con su atenta lectura algunos detalles del crimen que parecen habérsele pasado por alto a las autoridades: ¿por qué no llevaba la víctima su dentadura postiza? ¿Y cómo es que su joven y bella viuda parece tan aliviada por la tragedia? A pesar de lo descabellado de algunos de sus razonamientos y de un inesperado interés romántico, la apasionada entrega de Trent al arte de la deducción conseguirá desvelar lo que nadie esperaba que alguien como él fuese capaz de encontrar: la verdad.

La obra maestra de Bentley, fruto del hartazgo que causaba en él la infalibilidad de Sherlock Holmes, marcó el comienzo de la modernidad en el género con un memorable protagonista cuyo encanto reside, precisamente, en su capacidad para reírse de sus propios errores, mientras avanza con jovialidad por una de las más ingeniosas tramas que el lector pueda recordar.

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